Diorama

Los dioramas de hábitat han sido usados por los museos de historia natural para representar la vida silvestre en naturalezas intactas idealizadas. Estas representaciones ocultan la violencia y el imperialismo colonial detrás de la producción de colecciones taxidérmicas, al tiempo que ocultan los profundos cambios que el capitalismo industrial ha traído a estos territorios.
En contraste, este diorama reconecta intencionalmente al jaguar con la experiencia urbana. Aquí encontrará:
- algunos de los instrumentos y tecnologías que les investigadores usan para aprender y seguir el rastro del jaguar;
- la diversidad de paisajes e infraestructuras que reducen (y segmentan) exponencialmente el hábitat del jaguar;
- la profunda conexión que tienen muchas comunidades indígenas con el jaguar, y su rol continuo en la producción de conocimiento y la custodia de estos territorios.
- el tráfico ilegal del jaguar, y los procesos agroindustriales y extractivos conectados a cadenas globales de suministro de mercancías;
las diversas comunidades en lucha y su movilización por el derecho a vivir sin ser despojados o contaminados por las demandas de la vida urbana.

Los jaguares son animales solitarios y esquivos.

Herramientas e instrumentos median nuestro conocimiento del jaguar y los hacen visibles para les investigadores.

Las comunidades indígenas también tienen un rol central en la producción de conocimiento y custodia de estos territorios, al investigar y llevar a cabo procesos de monitoreo y observación.
— Cámaras trampa, radio-collares, y observaciones atentas del ambiente, cuerpos de agua, animales, y cobertura de la vegetación.

Muchos pueblos y ciudades coinciden con el Corredor Jaguar. La mayoría aún necesitan reconocerlo en sus políticas públicas y planes de ordenamiento, al igual que articular visiones regionales del territorio.
Los procesos descritos ocurren directamente en los paisajes del Corredor y están entrelazados con proyectos de monocultivo, minería y combustibles fósiles, empresas agroindustriales, y urbanizaciones.

Los principales determinantes de la disminución del hábitat del jaguar son la razón de que sea un territorio tan profundamente disputado, donde muchas comunidades habitan y luchan por justicia ambiental y su derecho a vivir en estos territorios. Esto no es ninguna exageración; América Latina es el lugar más peligroso del mundo para ser activista ambiental.
Wiphala*: “La presencia y poder de la red en la resistencia indígena pueden ser encontrados en la Wiphala, una malla cuadriculada de diversos colores utilizada por pueblos indígenas de los Andes para representarse a sí mismos a partir de 1,000 a.C. Más recientemente, una variante de siete colores de la Wiphala ha empezado a simbolizar los grupos indígenas que atraviesan los Andes de Chile a Colombia” (Leon and Herscher, 42, 2021).

La disminución del jaguar está entrelazada con procesos que ocurren directamente en los paisajes del Corredor y con territorios más amplios y distantes en el mundo. Estos paisajes están vinculados con cadenas globales de suministro que extraen y transforman las naturalezas en mercancías.

El reconocimiento del rol central que tienen los jaguares en los ecosistemas americanos es consistente con las cosmologías y conocimientos de varias comunidades indígenas en América, que por milenios han incorporado al jaguar a su red de relaciones, considerándolo un símbolo de poder, fuerza y fertilidad (Rabinowitz, 2014, p.37).
— Arte indígena amazónico en piedra cerca de 700AP en la “Maloca del Jaguar” (Arte rupestre) en el Parque Nacional Natural Serranía de Chiribiquete, Colombia. Año: 2016. Fotografía tomada por: Jorge Mario Álvarez Arango. Fuente: UNESCO.
— Wallace, S. (2018, October). Isolated Nomads Are Under Siege in the Amazon Jungle. National Geographic.